Todas las rutas de las armas en México terminan en Oaxaca. Fuente: PGR.
El cimiento de la sociedad se localiza en el sistema judicial, donde están las leyes que median entre los hombres y permiten una convivencia en paz. “Si éste falla, todo lo demás no funciona: La economía no cuenta con el escenario necesario para poder crecer y satisfacer las demandas de la sociedad; la política no se puede ejercer, ya que no existen los requerimientos mínimos para la participación en plena libertad; lo social es un imaginario donde la violencia es la forma de vida imperante.
En este texto presento un análisis sobre el posible escenario que vivirá Oaxaca en materia de seguridad judicial en el 2009. Primero, se traspasa lo judicial a la dicotomía seguridad/inseguridad que está viviendo el país. Segundo, se plantea la necesidad de revisar qué está pasando en Oaxaca. Tercero, señalo los problemas nacionales que tienen presencia en el estado. Cuarto, hago mención de los problemas locales que han ocupado lugares de ‘preocupación’ a nivel nacional e internacional. Por supuesto, la lista no es exhaustiva.
¿Qué está pasando en Oaxaca?
01. Después del 2006. Al final de la etapa ‘violenta’ del conflicto social del 2006, diferentes bandas de narcotraficantes se instalaron en el estado de Oaxaca, su presencia provocó que se comenzara una disputa por ‘la plaza’. Como consecuencia de esta lucha, los crímenes, con características de ajusticiamiento, comenzaron a tener presencia en todo el estado.
02. Felipe Vs. Narcotráfico. La guerra contra los cárteles de la droga, que se ha desarrollado en este sexenio, trajo el primer ‘golpe espectacular’ con la detención de Pedro Díaz Parada. Dicho suceso, provocó que diferentes bandas de narcotraficantes se comenzaran a pelear por los lugares que el cartel ‘Oaxaca’ perdía con la detención de su líder.
03. Cambios al interior de los cárteles. La presencia de diferentes cárteles de la droga y la disputa por Oaxaca, se debió a que distintas agrupaciones de esta índole comenzaron a tener diferencias al interior de su organización. La fractura provocó que los grupos de poder del narcotráfico se pelearan las plazas; por consiguiente el 2007 y 2008 fueron años de reacomodo. En el estado tienen presencia el Cartel Oaxaca, Sinaloa/Pacífico y el Cartel del Golfo, después de la fractura que viviera la ‘Federación’.
04. Prensa y activistas. Desde el conflicto APPO- S22/URO, se han cometido una serie de asesinatos de activistas y periodistas que provocaron recomendaciones al gobierno del estado por parte de Organismos Internacionales.
05. Bandas. Distintas bandas ‘juveniles’ se han instalado al interior del estado, especialmente en el Istmo de Tehuantepec y en la frontera con Chiapas, que han comenzado a vincularse con el crimen organizado. Destaca la presencia de la Mara Salvatrucha.
06. Armas. Oaxaca se ha convertido en mercado y paso del tráfico de armas para las diferentes bandas delictivas del país y hacia Estados Unidos y Centroamérica. Es en el estado donde termina una de las vías de este tipo de actividad ilícita.
07. Secuestros y levantones. Durante todo el 2008, los secuestros se incrementaron de manera alarmante. Diferentes personajes ligados a la política y al sector empresarial fueron privados de su libertad. Por otra parte los levantones, que están ligados al ajuste de cuentas entre criminales, se convirtieron en parte de la cotidianidad oaxaqueña.
08. Asesinatos públicos. En el primer semestre del 2008 comenzaron los asesinatos de policías en lugares públicos. En el siguiente semestre, diferentes medios de comunicación dieron a conocer la posibilidad de que los secuestros fueran orquestados desde diferentes esferas del gobierno. Tiempo después, el Procurador del estado recibiría una cabeza de parte del ‘Cartel del Golfo’. Por último; las narcomantas aparecerían en distintas ciudades del estado.
09. Vigilancia. Distintas dependencias del gobierno del estado se encuentran bajo ‘auditorías’ realizadas por la Auditoría Superior de la Federación.
10. EPR. El Ejercito Popular Revolucionario sigue teniendo presencia en Oaxaca. Hasta el momento sigue esperando el esclarecimiento de las desapariciones de varios de sus integrantes por el gobierno del estado.
¿Por qué está pasando?
01. El gobierno federal y estatal han sido rebasados por el poder del narcotráfico. La declaración de guerra trajo consigo una lucha frontal que ha divido la actuación del Estado. Uno, se enfrenta al narcotráfico; dos, lucha contra las filtraciones de estos en las esferas del gobierno. Oaxaca se encuentra viviendo en “Estado fallido” desde el 2006, las autoridades no cuentan con los recursos materiales y económicos y existe un déficit ‘intelectual’ en el recurso humano para enfrentar a la delincuencia. La muestra es la instalación de los cárteles, maras y tráfico de armas. La continuidad en el gabinete de seguridad no haexistido; desde el 2006, una vez al año, se ha cambiado a sus secretarios.
02. La falta de transparencia en la impartición de justicia ha provocado que Human Right Watch, Amnistía Internacional y Reporteros Sin Fron-tera otorguen a Oaxaca párrafos de preocupación en sus reportes anuales sobre la falta de libertad y respeto a los derechos humanos en el mundo. Oaxaca es comparado con países de Medio Oriente. Actualmente, ningún crimen ha sido resuelto por el gobierno de Ulises Ruiz.
03. Oaxaca se encuentra en una situación negativa en materia de seguridad, impartición de justicia y respeto a los Seguridad en 2009 derechos humanos. El gobierno del estado no ha cumplido con los estandares internacionales para respetar la libertad de expresión y los derechos políticos de los grupos opositores. Además, ha sido superado por las bandas de delincuentes.
¿Qué podemos esperar, en términos de seguridad, este año?
La agenda electoral de este año provocará que el gobierno del estado destine su atención a su reestructuración pues, muchos de los actuales secretarios buscarán una candidatura para diputados y, otros, trabajarán su precampaña para el 2010. El 2009 apunta a que el problema de la ‘inseguridad’ en Oaxaca pasará a un segundo plano pues, la atención será destinada al proceso electoral. Todo señala que los cárteles de la droga buscarán negociar con los partidos políticos por medio de la financiación de campañas.
El Ejército Popular Revolucionario tiene grandes posibilidades de reactivarse para invitar a los oaxaqueños a que no voten por el PRI. A este grupo, se le sumará la APPO y la sección 22 en “contra campaña” dirigida al partido oficial.
Si se descuida el combate a las organizaciones delictivas, el Estado seguirá perdiendo fuerza ante los cárteles de la droga. El panorama es preocupante para Oaxaca, en un balance los números resultan ser negativos, la violencia ha sido institucionalizada en este régimen: todo se resuelve por medio de las armas.
Ágora 